Güenipillan

Muchos no conocen este Nombre, muchos solo lo han visto en unos cuantos calendarios que mi madre ha repartido por todo mi Colegio. Es un mundo desconocido que tal ves muchos nunca lo van a conocer, esta apartado… escondido en un valle de encantos en donde siempre brilla el sol, es un Colegio y esta trabajando por aquellos niños que muchas veces son rechazado por la sociedad. Son niños que no vemos muy a diario por que en sus familias ya hemos creado esa semilla de miedo al rechazo. Son Ángeles que han venido al mundo a enseñarnos que la vida sigue y no tiene final, vienen con bien en su corazón y con lo que a nosotros nos hace falta, Amor… Son niños que necesitan de nosotros y no solo niños sino también adultos que son como ellos, hay de todos y ellos nos esperan a que nosotros brindemos nuestra mano para que ellos puedan caminar con confianza y alegría por este difícil camino que Dios les ha puesto por delante.

Mi Madre y un gran personal detrás para ayudar a estos niños, esta detrás de cada uno para enseñarle a entrar en esta maldita sociedad que los ha dejado afuera por la única razón de no ser como nosotros, de tener problemas y por vivir en un sector inferior a nosotros. Soy Alumno del Luis Campino de Providencia y tengo la suerte de poder vivir con ellos a Diario, poder compartir sus conductas, hablarles y hasta reír por cada maldad que ellos hacen, pero siempre detrás de un regaño y de unas sabias palabras que yo se que ellos llegan a escuchar. Los quiero y les he tomado mucho cariño a todos ellos, sin importar los golpes o las tallas que muchas veces llego a sentir. Son especiales para mi y para los ojos de Dios, para sus Profesoras y todo el personal que los mira desde lejos, dándole un apoyo incondicional y ayudando a levantar a cada joven que cae en su camino y se ha dado por vencido. Tengo 19 años y no puedo decir mucho sobre esta escuela, se ha creado cuando yo era muy pequeño pero pocas veces he participado en ella, hoy que ya soy mayor que puedo razonar y que veo el mundo con otros ojos puedo fijarme en lo que ellos son para mi y para ellos mismos, siempre dispuesto a escuchar y hasta acariciar a aquellos que más les hace falta, tengo su edad somos iguales, lo entiendo y los comprendo de otra forma de cómo lo hacen las mismas profes en el colegio, los veo con mis ojos, desde mi punto de vista y con mi mente de niño que aun no he perdido.

Son Ángeles que vienen a nuestro mundo a demostrar que son iguales que nosotros, que pueden luchar al igual que nosotros y que nunca tenemos que darnos por vencido, de ellos hay que aprender de su alegría y de su emoción por hacer algo mas de lo que la profes le exigen, de su amor incondicional y distinto a los de los demás, ¡De ellos tenemos que aprender!, no ellos de nosotros… somos gente que ha sido creada distinta y llegar a sus corazones es la tarea mas grande que nosotros nos llevamos, especialmente para las profes y el grupo que los acompaña, con el único objetivo de que algún día ellos sean recibidos como nosotros lo fuimos desde el primer día en que vimos la luz de este mundo.