Bajo la luz del crepúsculo.

Me sonrió sin saber quien era ni como me llamaba y aun así yo de ella lo sabia todo. Su mirada era brillante y encantadora, bajo el crepúsculo del atardecer sus ojos reflejaban lo que de verdad hablaba su interior. Eso me enamoro y aun así tuve que despertar, aun que era solo un sueño... sino un recuerdo de su respirar.

Comentarios

Entradas populares